martes, 20 de julio de 2010

No me pidas que te deje de amar.

Es difícil dejarte de amar.


En especial cuando posas eso ojos color miel, dulces, profundos en mi. 
Que me embriagan, me rodean con el más puro sentimiento, 
que hacen que me pierda en el tiempo, 
que me pierda en el espacio, 
que me pierda de mi, que me encuentre en ti
Porque los ojos son la ventana del alma 
y cuando los veo puedo tocarte el alma, puedes tocar mi alma. 
Tu alma me dice que sientes lo mismo que yo siento por ti.


Tus labios le dan señales a este calor que siento por dentro, 
que me invade, que quema cuando te siento cerca,
cuando siento tu respiración. 
Tus labios tocan mi alma con besos chiquitos dándole señales de tu amor.


Y entonces, ese calor se apaga por el gélido viento que recorre mi pecho
 y que llega hasta mi alma, 
pero que igual quema, aunque no con calor, mi pecho, mi corazón y mi alma 
hasta hacerlos cenizas, hacerlos nada.


Ese frío que aparece cuando te veo a su lado, 
dejo atrás el pasado y abro los ojos ante el presente. 
El que me dice que la palabra nosotros es imposible, 
que quedó en el pasado, 
que de ahora en adelante seremos yo, tú y ella


Es difícil dejarte de amar





         Sí, escribo "yo" al principio porque así como la "coma", tú te separas de mi para estar con ella. No es falta de educación amor.



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